Maca – Lepidium meyenii

Según fuentes históricas, los guerreros incas se fortalecían con maca antes de cada batalla: creían que la raíz de maca aumentaba su salud, su fuerza y su resistencia. Los pueblos indígenas de Sudamérica siguen utilizando la maca como planta medicinal y alimento. Su tubérculo tiene un alto valor nutritivo, comparable al del maíz, el arroz y el trigo.

En la cocina, la raíz de maca fresca suele hervirse en agua salada. Las raíces secas pueden convertirse en un postre dulce conocido como mazamorra. Las hojas verdes de la maca saben a berro y pueden comerse como ensalada. La planta también ha adquirido fama mundial como potente superalimento. La maca en polvo y en cápsulas se comercializa como suplemento dietético, a menudo con vitamina C añadida. El polvo y la raíz tienen un sabor dulce y suave a malta. La maca puede añadirse a batidos, leches de frutos secos, postres y muesli, y se le atribuye un efecto revitalizante.

La maca (Lepidium meyenii) es una planta que crece a gran altitud y en condiciones climáticas extremas: es originaria de las altas mesetas de los Andes peruanos, donde prospera a altitudes de 3.500 a 4.500 metros sobre el nivel del mar. Es una planta robusta y muy resistente. Ni el calor del día ni las heladas de la noche la afectan, y también soporta bien los suelos pobres, la luz solar intensa y los vientos fuertes.

La planta de la maca, herbácea y generalmente bienal, alcanza los 20 centímetros de altura. Pertenece al género de las crasas y a la familia de las crucíferas. Las plantas tienen hojas carnosas que forman densas rosetas y crecen a lo largo del suelo, como una estera, como protección contra los fuertes vientos. Las panículas de flores blancas aparecen en el segundo año de crecimiento.

Durante ele período de floración, de julio a octubre, emite una fuerte fragancia. Las raíces pivotantes se suelen cosechar en junio. Varían en color desde el blanco y el amarillo hasta el rosa y el rojo. La maca también se conoce como el "ginseng peruano".

Como alimento, la maca aporta energía y fuerza. La raíz de maca contiene carbohidratos, proteínas, lípidos y fibra, además de calcio, potasio, magnesio y hierro. Si bien sus beneficios para la salud son reconocidos desde hace tiempo, sus proteínas de origen vegetal también son de especial interés desde el punto de vista cosmético. Weleda utiliza péptidos de maca, que se extraen de las proteínas de la raíz del tubérculo mediante un proceso de fermentación enzimática. Su poder único reside en sus orígenes naturales. Como ingrediente activo innovador en productos cosméticos, los péptidos de maca desbloquean todo el potencial regenerativo de la raíz de maca, creando una fórmula revitalizante para la piel como nuestro órgano sensorial más grande. Los péptidos de maca activan la renovación celular y apoyan los procesos regenerativos innatos de la piel, además de mejorar la elasticidad de la piel y reducir los signos visibles del envejecimiento.